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Economía

El PP dice que “no es el momento” para rebajar el canon de saneamiento a Sniace y otras empresas en crisis

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"No es el momento ni el contexto adecuado". Así ha explicado el Grupo Municipal Popular su oposición a la enmienda a que proponía la rebaja del canon de saneamiento a familias necesitadas y empresas en crisis, entre ellas la torrelaveguense Sniace. Una enmienda presentada por el PSOE a la Ley de Medidas Administrativas y Fiscales que acompaña a los presupuestos regionales de 2013 y que este lunes se debatía en el Parlamento de Cantabria.

En la calle, frente al Parlamento, más de 200 trabajadores de Sniace y en la tribuna de invitados el comité de empresa, siguiendo atentamente las intervenciones del socialista Miguel Ángel Palacios, por parte de los proponentes de la enmienda, la regionalista Alodia Blanco, que ha defendido la oportunidad de la iniciativa, y el popular Luis Carlos Albalá, que ha defendido la postura del PP y del Gobierno regional.

Los trabajadores no se mostraron sorprendidos por el resultado de la votación, que encaja con los planteamientos que el presidente de Cantabria, Ignacio Diego, les ha puesto sobre la mesa en el último encuentro: el Gobierno prevé reformar el canon de saneamiento pero no será hasta finales de año.

La plantilla de Sniace se mantuvo durante buena parte de la sesión frente al Parlamento, donde la calle había sido cortada al tráfico y vallada, impidiendo que los concentrados se acercaran a la entrada del edificio, vigilado por un amplio despliegue policial. Los trabajadores, entre los que estaban los ex operarios de Nueva Papelera del Besaya, de la que también se hablaba este lunes en el pleno, mostraron sus habituales pancartas y abuchearon a los miembros del PP, especialmente al presidente Diego y al consejero Arasti.

El diputado popular Luis Carlos Albalá aseguró en la tribuna del hemiciclo que aceptar la enmiendas planteadas por la oposición supondría modificar completamente el texto, con un único artículo, y tildó las propuestas de socialistas y regionalistas de "demagógicas", mientras que el Gobierno cántabro tenía que asumir medidas para pagar las deudas que PSOE y PRC dejaron en ocho años de "desgobierno".

El socialista Palacios y la regionalista Blanco defendieron la necesidad de rebajar la factura del canon de saneamiento tanto a las familias que está padeciendo los efectos de la crisis y atraviesan situaciones precarias, como a las empresas de la región que, también están sufriendo dificultades. Como ejemplo pusieron a Sniace, a punto de concluir un ERE de seis meses para el 60% de su plantilla, unos 330 trabajadores, y abocada a un nuevo expediente de regulación de empleo si no hay avances notables en el próximo mes e incluso a un posible cierre de la planta de Viscocel.

La Ley de Medidas Fiscales se aprobó con los votos a favor del PP, en contra del PSOE y la abstención del PRC. Previamente, la mayoría absoluta del Partido Popular echó abajo las 15 enmiendas presentadas por la oposición, en concreto 10 del PRC y 5 del PSOE, que además de la rebaja del canon de saneamiento proponían suprimir el céntimo sanitario.