Los afectados por las preferentes se han concentrado ante la oficina central de Caja Cantabria en Torrelavega, denunciando la «estafa» de la que han sido víctimas y reclamando que les devuelvan su dinero. Una veintena de personas se ha manifestado ante la entidad de Caja Cantabria en la Plaza Mayor, cuyas cristaleras han empapelado con carteles y pancartas en las que se leían críticas hacia los responsables del banco.
«Chorizos», «ratas», «ladrones» han sido algunos de los términos que los afectados por las preferentes han dedicado a los directivos de Caja Cantabria y a las autoridades monetarias nacionales que a su juicio consintieron la «estafa» y ahora no toman medidas para reparar el daño causado, que pasa, recuerdan, por devolver íntegramente el dinero.
Con canciones y megafonía los manifestantes informaron a los ciudadanos que pasaban por la zona y a los clientes que entraban a la entidad de su situación y de cómo fueron «engañados» para que depositaran su dinero en lo que pensaban y les vendieron como inversiones seguras. Unas inversiones, destacan los afectados, que en la mayoría de los casos se han llevado los ahorros de toda una vida o «las cuatro perras» que los jubilados guardaban para tener cierta seguridad en su vejez.
Durante varias horas los afectados por las preferentes han recordado a los viandantes que Caja Cantabria olvidó que es «la caja de todos los cántabros» y dejó de lado su carácter social para quedarse con su dinero, un dinero que ahora reclaman.