Sexta manifestación desde que empezó el Expediente de Regulación de Empleo y primera del mes de marzo. Los trabajadores de Sniace han salido este viernes de nuevo a la calle y unas 4.000 personas les han acompañado, en una noche fría, pero por fin sin la lluvia que se había convertido en habitual en cada convocatoria.
Los manifestantes han coreado gritos como «Diego, escucha, Sniace está en la lucha», «Esto nos pasa por un gobierno facha» o «Calderón, dimisión», que ha sido uno de los más insistentes. La plantilla no ocultaba su preocupación sobre últimos datos sobre los «números rojos» de la empresa, o lo que puede suponer la «reestructuración» anunciada por el presidente de Sniace, Blas Mezquita, que el lunes se reúne con Ignacio Diego para explicarle en qué consistirá.
La ausencia de lluvia ha animado a los manifestantes a pausar el recorrido, con varias paradas a lo largo de la ciudad, y a modificar el itinerario habitual. Al llegar a la altura del Ayuntamiento la manifestación ha pasado de largo hasta Cuatro Caminos, donde han permanecido unos diez minutos, para volver hacia el Consistorio pero entrando esta vez por Julián Ceballos.
Otra novedad este viernes ha sido la cabecera de la manifestación. Un grupo de trabajadores esperaba a la entrada de la ciudad con una pancarta que rezaba «Azsa Hinojedo con los obreros de Sniace». Los trabajadores de la papelera, tras brindarles un aplauso, les han invitado a encabezar la manifestación, por delante de la habitual pancarta de «Sniace en lucha por su futuro otra vez».
Esta era la primera manifestación tras conocer que el Grupo Sniace ha entrado en «números rojos», después de perder el año pasado más de 21 millones de euros y registrar una bajada de ventas del 15%. Un «mazazo», señalaba el presidente del comité, Antonio Pérez Portilla, que para los trabajadores significa «más problemas y más dificultades».
Eso a pesar que al comité «no le salen las cuentas». Según Portilla, han sido «los primeros sorprendidos», porque los últimos datos que manejaban era que el año pasado Sniace estaba perdiendo a razón de 1,1 millones de euros al mes, debido principalmente al encarecimiento de las materias primas. No entienden por tanto cómo se ha pasado de unos 9 millones de pérdidas en septiembre a 21 millones al acabar el año.
Al margen de las cuentas, la cuestión es que «la cosa pinta mal», ha asegurado Portilla. «Montamos un circo y nos crecen los enanos», ha ironizado.
La plantilla está ahora expectante ante el encuentro que este lunes mantendrán el jefe del Ejecutivo regional y el presidente de Sniace, en el que este último dará a conocer a Diego en qué consistirá la reestructuración anunciada, «aunque sólo el nombre ya da un poco de yu-yu», ha dicho el presidente del comité. Los representantes sindicales esperan que tras ese encuentro con Diego, Mezquita cumpla su compromiso de reunirse con ellos y les cite la próxima semana.
La plantilla continuará la próxima semana con el calendario de movilizaciones. El jueves, a las 11.00 horas, se concentrarán frente al Ayuntamiento y el viernes, a las 19 horas, habrá una nueva manifestación en Torrelavega. Al ser 8 de marzo, Día de la Mujer, han anunciado que la pancarta que encabeza la manifestación no será llevada por los miembros del comité, sino por trabajadoras de la fábrica. Antes habrá una asamblea, para informar a la plantilla de las noticias que se produzcan en las reuniones a la vista, y para organizar la presencia de Sniace en la manifestación que el domingo 10 se celebrará en Santander.