La sección sindical de APLB (Asociación de Policía Local y Bomberos de Cantabria) en el Ayuntamiento ha denunciado la falta de efectivos que sufre el departamento de Policía Municipal de Torrelavega, que en estos años «está haciendo vivir al cuerpo los peores días que se recuerdan». Como ejemplo de la «dejadez» en materia de recursos humanos, señalan que solo durante los años 2022 y 2023 la plantilla ha perdido 9 agentes y el proceso selectivo para cubrir «tres escasas plazas», correspondientes a la Oferta de Empleo Público de 2020, «se encuentra paralizado desde hace meses, a falta de dos pruebas y sin argumento razonable conocido».
Desde APLB, aseguran que esta situación adquiere relevancia en los momentos en los que se produce alguna circunstancia o festejo que moviliza un alto número de personas en la ciudad, cortes de calles, etc. «con pocos agentes disponibles para reforzar el servicio ordinario o atender los diferentes eventos, que por otro lado se han multiplicado enormemente en los últimos tiempos».
Según denuncian, hay agentes que «al margen de su ciclo diario, prestarán servicio todos los fines de semana del verano, en horarios extremos, cambiantes de un día para otro y nombrados con tan poca antelación que hace imposible conciliar la vida privada o familiar». Para este sindicato, esta circunstancia «se agrava hasta lo insostenible durante las presentes fiestas patronales, cuando ni con abusivos nombramientos se consigue reforzar debidamente los equipos de trabajo, produciéndose situaciones como el inicio de la tarde de este martes 15, con miles de personas por nuestras calles y únicamente tres agentes patrullando».
A su juicio, «resulta paradójico que, a pesar de ser demostrable que se trata de uno de los cuerpos policiales menos valorados de todo el país por sus propios dirigentes locales, cuando llegan estas fechas todo el peso recae sobre la experiencia y profesionalidad de los propios policías», quienes «absorben y remedian las quejas vecinales derivadas de la mala planificación», evitando en muchas ocasiones que lo que califican de «chapuzas organizativas» acaben «en desgracia». Los agentes, asegura el sindicato, «plasman en cada intervención un nivel de competencia y compromiso muy por encima de lo que se les reconoce».
No obstante, desde esta sección sindical quieren «dejar constancia de que el agotamiento físico y mental no impedirán cumplir las funciones elementales de los servicios, pero ante una emergencia o un problema complejo resulta prácticamente imposible que un agente que ha estado varios días maldurmiendo, se ha levantado a las 5 de la mañana y lleva prestando servicio durante 14 horas pueda intervenir con la energía y concentración necesaria para dar una respuesta rápida y eficaz», y eso, advierten, pone «en riesgo tanto su integridad como la seguridad del ciudadano».
Finalmente, APLB ha querido recordar que la organización, logística, vallado, horarios y localización de las fiestas no corresponde al departamento de policía. Por ello, solicitan tanto el respeto como la colaboración de la ciudadanos hacia unos agentes que «atienden un servicio que se encuentra desbordado».
Pese a todo ello, el sindicato ha aprovechado también «para desear a nuestros vecinos que puedan disfrutar felizmente de sus merecidas fiestas».