Más de un millar de reses de vacuno, caballar, asnal, ovino y caprino, se han dado cita este miércoles en la tradicional Feria de Año de Santa Lucía en Carrejo (Cabezón de la Sal). Una de las ferias más antiguas de Cantabria y una de las últimas del calendario de la región, que a pesar de celebrarse este año en día laborable ha reunido a buen número de profesionales y público en general.
Un total de 36 ganaderías se han acercado hasta la campa cercana al Puente de Santa Lucía, en Santibañez de Carrejo para mostrar sus animales, en el que, como siempre, predominó el vacuno, con más de 600 reses, 350 de caballar y asnal, y 130 de ovino y caprino.
El alcalde de Cabezón de la Sal, Víctor Reinoso, destacaba la implicación de la localidad de Carrejo y de todo el municipio con esta feria de Santa Ludía, muy arraigada en las tradiciones de la zona.
La jornada comenzaba a primera hora de la mañana con la llegada de las reses y se prolongaba hasta primeras horas de la tarde, favoreciendo la ausencia de lluvia durante la primera mitad del día en la zona de Cabezón de la Sal el que el público se acercara hasta Carrejo para visitar la feria.
Pasadas las dos de la tarde se realizaba la entrega de obsequios a todos los ganaderos participante y la rifa de regalos, donados por entidades y establecimientos y empresas de la zona para el público asistente, desde herramientas hasta cenas en establecimientos cántabros. También era el momento del recuerdo y el homenaje a ganaderos.
Además, en las inmediaciones de la campa donde se celebraba la feria, en las márgenes de la carretera general de Carrejo, se instalaban algunos puestos de venta de quesos, dulces y productos de la huerta.