In Memoriam de quienes creyeron en una España mejor
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- Publicado el Viernes, 03 Abril 2015
- Escrito por Cecilia Gutiérrez Lázaro (Secretaria UGT-Besaya)
El 14 de abril de 1931 se produjo en nuestro país la proclamación de la II República y con ella se produjo un estallido de alegría popular que recorrió las calles de todas las ciudades de la geografía española. La llegada de la Democracia que acompañó a la proclama republicana encarnó para la ciudadanía que ocupó los espacios públicos aquél día un futuro pleno de ilusiones cumplidas de libertad, igual y justicia social que habían sido anheladas por largo tiempo en una España en la que las minorías privilegias habían sido casi los únicos sujetos de derechos plenos y los propietarios del poder político.
Pero igual que llegó con alegría, la II República iba a llegar a su fin en medio de un baño de sangre cuya responsabilidad última y primera iba a corresponder a esas mismas minorías que habían recibido al nuevo régimen con temor porque su visión patrimonialista del poder político les impidió aceptar el hecho de que la ciudadanía española había reclamado para sí el derecho que tenía de decidir hacia donde orientar su futuro y, con él, el de la nación en su conjunto.
Y como no podían consentir, ni aceptar la madurez política de sus conciudadanos dieron un golpe de estado y como la sociedad resistió el envite...desencadenaron una Guerra Civil con la que pretendieron no solo recuperar el poder sino acabar físicamente con cuantos españoles y españolas desde partidos políticos, sindicatos y todo tipo de organizaciones habían promovido el impulso político democrático y republicano; alentado estrategias sociales y sindicales que habían transformado el mundo laboral en favor de la clase trabajadora o habían contribuido a desarrollar el pensamiento científico y defendido una educación pública laica y de calidad para todos y todas las españolas.
Más allá de los campos de batalla, los sublevados provocaron el exilio y la muerte en todos los territorios que fueron ganando a la legalidad democrática republicana. Primero asesinando a todo aquél que identificaban como "rojo" a su entrada en las poblaciones, en unas acciones de terror que es conocido como "caliente" entre los historiadores, y días después con matazas sistemáticas tras unos simulacros de "justicia" que no fue más que terror alegal.
Los que así fueron asesinados yacen, aún hoy en día!, en su mayoría en cunetas, montes y fosas comunes sin que nadie haya restituido su memoria porque no fueron exterminados por crímenes contra otros españoles o españolas sino por haber permanecidos fieles a sus ideas y a la legalidad republicana. Así, cada 14 de abril somos muchos y muchas los que dejamos a un lado nuestros quehaceres para dedicar unos minutos de nuestras vidas a recordar ese sueño frustrado de democracia republicana, que fue la primera democracia plena de nuestro país, y homenajear a aquellos y aquellas de nuestros conciudadanos, compañeros y compañeras de organización muchos de ellos, que no solo la hicieron posible sino que dieron la vida por ella.
El 14 de abril se dio el pistoletazo de salida al proceso de construcción de una nueva nación española...republicana, laica, igualitaria y social....y otros miles de pistoletazos terminaron por llenar de españolas y españoles las cunetas y fosas comunes de los cementerios...de unos hombres y mujeres que creyeron firmemente en que una España mejor era posible!