Economía

Mezquita no despeja ninguna duda en la Junta de Accionistas de Sniace

"Moderado optimismo" y posibles "medidas drásticas". Como era previsible, el presidente de Sniace, Blas Mezquita, no ha despejado en la Junta de Accionistas ninguna de las dudas que planean sobre el futuro de la fábrica de Torrelavega y sobre su plantilla. Mezquita ha repetido ante los accionistas las declaraciones que ha venido realizando en las últimas semanas, tanto públicamente como en las reuniones con el comité de empresa: en estos momentos es "imposible" decir si será necesario un nuevo Expediente de Regulación de Empleo, el futuro de Sniace depende de que las administraciones tomen medidas que reduzcan la carga impositiva que ahora grava a la empresa y el grupo no puede soportar económicamente la situación actual durante mucho tiempo.

Blas Mezquita ha presentado ante la Junta de Accionistas el informe de gestión y las cuentas de 2012, con representantes del comité de empresa y trabajadores-accionistas en la sala, y en la calle los gritos constantes de cerca de 250 personas, que durante toda la asamblea no han dejado de corear lemas como "presidente incompetente" o "Mezquita escucha, Sniace está en la lucha". Los trabajadores, desplazados a Madrid en cuatro autobuses, han reclamado a los propietarios de la empresa que hagan todo lo necesario para gantizar la pervivencia de Sniace.

El presidente, que ha asegurado que su gestión se ha basado en "la prudencia y la anticipación", ha repasado la situación de la empresa, el "impacto brutal" de los cambios tributarios, los proyectos incluidos en el plan de viabilidad y el ERE que afecta al 60% de la plantilla.

Según ha dicho, en este momento hay planteadas vías de solución, a través de las medidas anunciadas por las administraciones, sin embargo "no se ha alcanzado la concrección necesaria para determinar las líneas de ejecución a seguir", por lo que también "resulta muy complicado en estos momentos dar un calendario cerrado" de las próximas actuaciones que tomará la dirección de Sniace.

Al mismo tiempo, también ha afirmado que "la línea roja" la marca la inminente conclusión del actual ERE, que finaliza el 15 de julio, por lo que antes de esa fecha habrá que "tomar decisiones" y estas serán las que "imponga la realidad". Aunque en principio, Mezquita aludía así a un segundo ERE, ha asegurado que si esas vías de solución que hay a la vistano fructifican, habría que hablar de "medidas costosas y dificiles que estamos intentanto evitar".

En la Junta han tomado la palabra, en su calidad de accionistas, dos de los trabajadores de Sniace. Luis Corrales ha recordado a los accionistas que "tienen la obligación de administrar una empresa con más de 70 años de hisotria,que ha supuesto un auténtico motor en la economía de la región" y que en sus decisiones está el futro de más de 500 empleos, que no son solo un número sino "500 vidas y 500 familias". Corrales, delegado de CCOO en el comité de empresa ha pedido al presidente que no prorrogue el ERE y que ponga en marcha Viscocel, planificando con los sindicatos el Plan de Viabilidad que ha presentado. Además, ha reclamado la reducción de los consejeros para aligerar los costes económicos de la empresa.

Otra trabajadora, Dolores Mantecón, miembro del comité por USO, ha afirmado que Sniace tiene futuro, que es necesario corregir la tributación que la está lastrando y que hay que seguir pensando en la empresa como un "todo".

Al término de la Junta, Blas Mezquita ha insistido, en manifestaciones a HoyTorrelavega, que en este momento es "imposible" decir si será necesario o no un segundo ERE y que su discurso conjuga el "moderado optimismo" con una situación difícil, porque las medidas que pueden ayudar a Sniace no están concretadas. Por ese mismo motivo, ha asegurado que, con las condiciones actuales es imposible reabrir Viscocel y, ha asegurado que la empreas no podrá aguantar demasiado tiempo las actuales pérdidas económicas.