Jue25042024

Last update09:47:04 PM

Economía

La plantilla de Sniace espera cobrar febrero con los últimos pedidos

Valoración del Usuario:  / 0
MaloBueno 
SniaceConcentracion240220

La plantilla de Sniace ha acordado permitir este martes la salida de camiones con producción de la planta de Celulosa, tras reunirse con el director general de la compañía, Adolfo del Corral, y recibir la información que reclamaban sobre los pedidos que se están sirviendo tras anunciarse la liquidación. Los trabajadores esperan además que la venta de esos pedidos sirva para pagar sus nóminas de febrero, ya que en estos momentos "no hay caja" para hacer frente a los salarios.

 

El director general les ha explicado que son pedidos recibidos antes de la liquidación y que es "imprescindible" la salida de los camiones. Una vez se cobren "es probable" que puedan reciban sus sueldos de febrero; en caso contrario les ha asegurado que la empresa no podrá pagar las nóminas.

El secretario del comité, Francisco Plaza, ha recordado que la nómina de febrero incluye además "el pago un acuerdo al que llegamos en el SIMA, en Madrid, del pago de la antigüedad del año 2018, el 50% de esos atrasos que incumbe a la mayoría de la plantilla". Por eso, ha dicho, los trabajadores han entendido que "lo más razonable" es dejar pasar los camiones porque de lo contrario "sí que habría posibilidad nula de cobrar" y en la asamblea celebrada tras la reunión han acordado por una muy amplia mayoría no impedir que salgan los pedidos.

Los trabajadores iniciaban a las 6.00 horas una concentración a la puerta de la fábrica para exigir una reunión con el máximo accionista, Sabino García Vallina, o con la presidenta, Gema Díaz Real, y que se les explicase por qué en los últimos días estaban saliendo más camiones de producción de lo que suele ser habitual y por qué la dirección de la empresa está tomando decisiones sin esperar a que el administrador liquidador se haga cargo de la compañía.

Como medida de presión bloqueaban la salida y entrada de camiones de Celltech y anunciaban que, aunque la concentración estaba prevista hasta las 18.00 horas, no la abandonarían sin la reunión solicitada. La niebla en el aeropuerto Seve Ballesteros vino a complicar la jornada, impidiendo que la reunión se pudiera celebrar a las 10.00 horas, como había anunciado la empresa al comité, al no poder aterrizar el avión que traía al director general desde Madrid y tener que hacer el trayecto por carretera.

A pesar de que desde la fábrica se les instaba a permitir el paso de los camiones una vez en proceso la reunión, apuntando que el retrasar su salida supondría importantes costes, los trabajadores decidieron jugar esa baza para poder conseguir la información que llevan tiempo reclamando y una veintena de camiones se acumularon frente a las antiguas instalaciones de Llilion, hasta que pasadas las 12.00 se marchaban de vacío.

Finalmente, a las 16.00 horas, el director general de la compañía, Adolfo del Corral, y el director de la fábrica de Torrelavega, Javier Castillo, se reunían con el comité de empresa. "Se nos han dado todas las explicaciones que pedíamos y todas esas dudas han quedado resueltas", ha dicho el secretario del comité, Francisco Plaza.

Entre las respuestas, las fechas de los pedidos "con papeles"; los precios a los que se está vendiendo la celulosa, que "son los de mercado"; y que todas las decisiones se están tomando "de acuerdo con los administradores concursales", ha detallado Plaza. Satisfechos también los trabajadores con el compromiso del director general de que a partir de ahora "habrá información más constante" y las reuniones que sean necesarias sin que tengan que pedirlas con movilizaciones.

Respecto a otras cuestiones, como hasta cuándo seguirán trabajando, no han obtenido respuesta "porque todavía no lo saben", ha señalado el delegado sindical. En principio, habrá que esperar a que el juzgado nombre oficialmente al administrador liquidador y es probable que una de sus primeras decisiones sea iniciar el expediente de extinción de empleo.

El comité también ha planteado al director general las preguntas que tenían para el máximo accionista, Sabino García Vallina, sobre el motivo que llevó a tomar la decisión de liquidación de forma, a su entender, precipitada. "No le culpamos del cierre, sí reprochamos el cómo se ha llevado a cabo el proceso, porque entendemos que se podía haber aplicado el ERTE, haber hecho la parada de otra manera y haber ganado algo de tiempo", ha detallado Plaza, "y la explicación que nos ha dado es que no había suficiente liquidez para afrontarlo ni siquiera de esa manera".

Los trabajadores decidirán en los próximos días si realizan otras movilizaciones para dar visibilidad a su situación y en qué consistirán. Mientras, el comité ha iniciado hoy con el PSOE una serie de reuniones con los grupos políticos del Parlamento de Cantabria para explicar su situación y recabar apoyos.