Será una lucha «difícil y dura», pero la plantilla de Saint-Gobain Glass está dispuesta a pelear para que una empresa que lleva 90 años en Vioño de Piélagos y que tiene «viabilidad» no cierre y «deslocalice» su producción a otros países. Los trabajadores han comenzado hoy esa batalla con una gran manifestación en la que más de un millar de personas del municipio y del resto de la comarca les han apoyado.
«No al cierre» y «Esta chimenea, no se menea», han sido algunos de los lemas que han coreado los manifestantes en su recorrido desde la puerta de la fábrica hasta el Ayuntamiento de Piélagos, donde han sido recibidos por los representantes municipales. En ese recorrido, numerosos comercios de Vioño y Renedo han cerrado sus puertas en solidaridad con la plantilla de Saint-Gobain.
También trabajadores de otras empresas de la comarca (Nestlé, Funditubo, Sniace…) acudieron a respaldar a la plantilla de «La Vidriera», al igual que los políticos regionalistas Miguel Ángel Revilla y Rafael de la Sierra, y las socialistas Eva Díaz Tezanos y Lola Gorostiaga, y los secretarios generales de UGT, María Jesús Cedrún, y de CCOO, Carlos Sánchez.
La movilización ha comenzado con una concentración a la entrada de la fábrica y a las 17.00 horas ha arrancado la manifestación, encabezada con una pancarta en la que se leía «No al cierre de Saint-Gobain», y por la carretera general ha caminado hasta el centro de Renedo, para retornar hasta el Ayuntamiento de Piélagos, donde el comité ha sido recibido por los representantes municipales.
Los sindicalistas han agradecido a la Corporación su apoyo pero les han pedido que hagan «lo que tengan que hacer» para conseguir que una empresa que durante casi un siglo «ha dado de comer a mucha gente» y que es «muy importante» para Piélagos, siga en el municipio.
«No podemos dejar que se vaya al garete, tenemos que remar todos en la misma dirección», ha pedido el presidente del comité, Javier Ruiz, insistiendo en que Saint-Gobain Glass «tiene futuro y viabilidad» y a lo que se enfrentan es a una decisión de «deslocalización» de la multinacional francesa.
El alcalde de Piélagos, Enrique Torre (PP), para el que la decisión de Saint-Gobain fue una sorpresa de la que tuvo conocimiento el mismo día que se anunció a la plantilla, ha asegurado al comité que cuentan con «el apoyo de la Corporación» y lo seguirá teniendo en una situación que será «difícil y dura para vosotros y para el municipio».
Así, se ha acordado por unanimidad dirigirse al Gobierno regional para que «lo que puedan, lo hagan», para evitar el cierre de una empresa que «significa mucho» para Piélagos y para las localidades vecinas.
También pedirán a la empresa que «reconsidere» su anuncio de cierre. «Si durante 90 años ha estado bien aquí, igual ahora hay unos años que no está tan bien, pero la crisis afecta a todos», ha valorado Torre, que cree que es el momento de que las «hermanas mayores de esta multinacional» ayuden a la planta de Vioño a superar esta situación.
A la salida de la reunión en el Ayuntamiento, el presidente del comité se ha dirigido a los manifestantes que esperaban en el exterior para agradecer su asistencia y pedirles su apoyo en esta lucha que «acaba de comenzar y sabemos que será complicada, pero Saint-Gobain tiene futuro y viabilidad».
«No podemos consentir que se deslocalice un producto que hacemos nosotros en Vioño para llevarlo a Alemania y a empresas low-cost en Polonia», ha dicho Javier Ruiz, que ha finalizado su intervención entre aplausos con una de las frases que se ha coreado durante la manifestación: «Esta chimenea, no se menea».
La negociación del expediente de cierre que ha presentado Saint-Gobain Glass por «cuestiones productivas» comenzará el próximo viernes, cuando la dirección entregará al comité la documentación. A partir de ese momento, los representantes de los trabajadores decidirán las acciones a tomar.