El comité de Sniace ha solicitado al presidente de la empresa, Blas Mezquita, una reunión para definir los contenidos de la «hoja de ruta» para el plan laboral, del que hasta ahora los trabajadores sólo conocen una parte, y conocer los siguientes pasos que se van a dar. Entre otras cosas, la dirección tiene que detallar desde el montante de las indemnizaciones para quienes se acojan a las bajas incentivadas, hasta las condiciones de reincorporación a la fábrica para el resto de la plantilla.
La «hoja de ruta», que es el nombre que el propio Mezquita ha empleado hasta ahora para definir el documento, fue aprobada ayer por el Consejo de Administración de Sniace, al que también asistieron los administradores concursales. Finalmente la empresa no se reunió específicamente con los concursales, como anunció en Madrid al comité, sino que el encuentro se produjo en el marco del Consejo de Administración.
A través de los interlocutores habituales, la empresa ha transmitido que a los administradores «les gusta la música y la partitura, aunque esta última hay que bajarla y ajustar su intensidad», ha explicado el secretario del comité, Antonio Pérez Portilla.
«A buen entendedor sobran las palabras, pero como estamos seguros de que en la otra parte también hay buenos entendedores: el posicionamiento del comité es de sobra conocido», ha señalado el portavoz sindical. A su juicio, la «parquedad» de las explicaciones de la empresa, a pesar de las muchas cuestiones que hay que aclarar, hace más que necesaria la reunión solicitada y sin mucha demora porque «estamos pillados por el tiempo».
Además, Pérez Portilla ha trasladado a la empresa su malestar porque estas explicaciones se han recibido tras dirigirse a la fábrica para solicitar información, ya que el compromiso de Blas Mezquita fue informar telefónicamente al comité de la respuesta de los administradores concursales y sin embargo no lo cumplió. «Esto no son formas; los trabajadores sí cumplimos nuestro compromiso y en cuanto la asamblea aprobó seguir adelante lo comunicamos, pero el presidente no lo ha hecho», ha señalado.
Por lo demás, los trámites para los puntos ya conocidos, prejubilaciones y bajas, siguen adelante. Este jueves, a las 10.00 horas, se celebra en el CIMA una reunión, con la asistencia del director de Recursos Humanos, José Manuel Colio, para los trabajadores con edades entre los 58 y los 63 años (a fecha 31 de diciembre). En ella se entregará a cada trabajador «prejubilable» el borrador de cómo quedaría su incorporación a la póliza y las cantidades que percibirían hasta llegar a la jubilación.
La propuesta de la empresa son prejubilaciones con un neto del 80% del salario, sin revalorización anual. Una vez conocida su situación respecto a la póliza, los trabajadores de mayor edad podrán valorar si les interesa entrar en la póliza o cobrar la indemnización, de donde la empresa espera sacar buena parte de la treintena de bajas con las que, según sus cálculos, podría rebajar el coste global del plan laboral.