El magistrado del Juzgado Número 1 de Santander ha absuelto a los dos trabajadores de Sniace a los que el secretario comarcal de USO y delegado en la empresa, Justino Sánchez, denunció por injurias. En el juicio de faltas celebrado hoy, el juez ha valorado que los comentarios que los acusados, padre e hijo, realizaron en su perfil personal de Facebook contra Sánchez se enmarcan en el conflicto laboral de la empresa y la tensión que viven los trabajadores.
Los denunciados, Alberto y Borja Peláez, han estado acompañados por unos 70 trabajadores de Sniace y los representantes del comité, que tanto en el exterior del Juzgado como en el pasillo de la sala de vistas les han mostrado su apoyo.
Sánchez, que ha acudido al juicio acompañado por la secretaria regional de USO, Mercedes Martínez, y un afiliado de su sindicato, ha sido recibido con abucheos y gritos de «traidor» y «vendido», mientras que alguno de los presentes le ha increpado: «¿no nos han hecho bastante daño todavía?».
Según han destacado los trabadores absueltos a la salida, el propio juez ha preguntado al delegado de USO por sus problemas de relación con el resto de la plantilla. «¿Usted tiene muchos enemigos en Sniace, no?, ha inquirido el magistrado, tras escuchar los improperios que en el pasillo ha recibido Justino Sánchez.
Los acusados han explicado que las descalificaciones que hicieron el pasado 27 de septiembre en su perfil personal de Facebook, «que no es público», se produjeron tras conocer la negativa de Justino Sánchez a firmar el acuerdo laboral con la empresa que abre la puerta a la readmisión de la plantilla y el «coraje» al ver que los «intereses» del delegado de USO ponían «en peligro» sus puestos de trabajo y la lucha de los dos últimos años para reabrir Sniace.
También han precisado al juez que los improperios se dirigieron a Justino Sánchez como delegado sindical y miembro del comité, por la actitud que ha mantenido en el conflicto de Sniace, a su entender contraria a los intereses de los trabajadores, aunque han reconocido que fueron fruto de «un calentón» y que estuvieron «mal dichas».
El magistrado, Jaime Parra, ha resuelto, tras solicitar a los trabajadores unas disculpas por sus palabras, absolver a los acusados; decisión que ha sido recibida con aplausos por los compañeros de los dos trabajadores.