La Consejería de Sanidad, a través de la Dirección General de Salud Pública, acaba de facilitar a la Federación de Cofradías de Pescadores de Cantabria 800 test rápidos de detección de anticuerpos que habían solicitado para hacer pruebas a todos los profesionales que trabajan estos días en la costera del bocarte. Los representantes del sector pesquero en Cantabria solicitaron las pruebas el pasado domingo y ayer lunes se ha puesto a su disposición una partida completa de test.
La Federación tiene previsto comenzar a realizar los test a finales de esta semana y, a los pescadores que den positivo en anticuerpos, el Servicio Cántabro de Salud, a través de los dispositivos establecidos al efecto, les realizará una prueba PCR de detección activa de la enfermedad para realizar un seguimiento adecuado de los trabajadores y aplicar los protocolos previstos.
Los pescadores que den negativo en el test de detección de anticuerpos deberán seguir cumpliendo estrictamente las medidas de higiene, distancia social y autovigilancia de síntomas y deben reportar inmediatamente cualquier cambio en su estado de salud.
La directora general de Salud Pública, Paloma Navas ha aclarado que esta costera es una actividad productiva con una situación epidemiológica muy particular en la que «los profesionales del sector trabajan con proximidad, permanecen horas e, incluso, días, en espacios reducidos e interactúan continuamente, muy alejados físicamente de los centros de atención sanitaria».
Los marineros tienen una situación «única y específica», ya que pueden pasar días alejados de un centro sanitario y a muchas horas de distancia y, en las embarcaciones, por la naturaleza de la faena y la exposición permanente al agua del mar dificulta el uso correcto de las mascarillas, ha añadido Navas.
Por eso, ha explicado, de forma previa al inicio de la costera se aprobó un protocolo concreto de actuación y, desde el día 17 de abril, un grupo específico de vigilancia epidemiológica analiza las fuentes de datos y monitoriza los posibles casos del comienzo de esta actividad productiva para que puedan desarrollar su trabajo «con garantía y en condiciones de seguridad». Además, el Servicio de Seguridad Alimentaria ha facilitado un protocolo específico para apoyar el desarrollo seguro de la pesca en el mar.
Esta vigilancia activa ¿ha enfatizado la titular de Salud Pública- es también una oportunidad para analizar la evolución del COVID-19 en el contexto de una actividad productiva y aportará información «muy útil» para definir la vigilancia epidemiológica necesaria para definir las acciones de desescalado y retorno a la actividad económica, algo que también es prioritario para la Consejería de Sanidad.
Por último, Navas ha tenido palabras de elogio tanto para la Federación de Cofradías como para los trabajadores del sector «realmente preocupados por cumplir todas las recomendaciones sanitarias» que son para ellos una prioridad y hacerlas compatibles con una actividad tan importante para la región como es la pesca».
Un elogio que ha hecho extensivo tanto al consejero de Desarrollo Rural, Ganadería, Pesca, Alimentación y Medio Ambiente, Guillermo Blanco, como la directora general de Pesca, Marta López, que están proporcionando apoyo estrecho al sector para que la costera del bocarte se desarrolle con total normalidad.